Es una de las decisiones más importantes de tu vida y necesitas tener toda la confianza del caso para elegir la carrera que estudiarás. Antes de que escojas o ayudes a alguien a hacerlo, entérate de los peores errores que se cometen ante una decisión de vital importancia. De ti depende el ingresar y no decepcionarte de lo conseguido.
Si tu eres quien va a elegir la carrera o vas a ayudar a alguien, recuerda que lo importante es siempre descubrir la vocación, para eso están las charlas, test, foros de consulta, entrevistas con testimonios, así como enterarte de las nuevas carreras y otras alternativas profesionales que siempre te podrían motivar a tener una idea mucho más amplía al momento de decidir.
Que tus padres elijan por ti: Este es uno de los errores más clásicos y comunes, algo que muchos piensan que ya no se practica, pero que sigue tan vigente como antes. Muchas veces los hijos suelen acceder por la presión familiar impuesta. Esto suele ser alimentado desde la infancia por los anhelos incumplidos de los padres, que ven a su hijo como el medio de hacerle la revancha a la vida.
Elegir la carrera que llevará tu mejor amiga(o): Decisión de la más inmadura que existe, es como querer arrastrar el colegio hacia la universidad, pero aunque no se crea, esta costumbre de postular, ingresar y estudiar la misma carrera, en la misma universidad por varios amigos es una practica tan común como la anterior. Aquí el grupo apela a la nostalgia y a la seguridad que tienen entre si, para enfrentarse a algo nuevo como el llevar estudios superiores.
Elegir la carrera que te hará ganar más dinero: Muchas personas suelen monetizar todo en la vida, y eso provoca que saquen la cuenta de cuanto ganarían al terminar una carrera o cuanto gana un egresado. Dejando de lado el talento, la vocación y el entusiasmo por hacer algo. El que es bueno en su labor, siempre será requerido y tendrá ingresos. Pero el individuo que terminó en la mejor universidad, pero que no es talentoso o no es su vocación, probablemente no sea tan bueno en dicha profesión y por lo tanto, no será tan requerido.
Elegir la que más demanda tiene actualmente: Esta decisión es una de las más terribles, porque cada cierto tiempo la profesión más demandada varía y esto hace que, cuando termines (en tres o cinco años) ya no sea como cuando empezaste y al final terminas trabajando en otra cosa a la que estudiaste. Es correcto darle un vistazo a tales datos, pero no considerarlos para decidir qué estudiar.
Elegir una carrera solo por impresionar a alguien: Los jóvenes son, a veces, tan raros en sus decisiones que muchas veces, al desear impresionar a alguien, en especial al sexo opuesto, hacen hasta lo indecible por quedar bien, y postulan a medicina, derecho y muchas veces sin agradarles. Otros lo hacen para no quedar, supuestamente mal, por ejemplo: el hijo de la otra familia ingresó a medicina y entonces se genera la competencia con resultados muy malos para quien se inmola en nombre del ” honor de la familia”. Realmente una triste decisión.
Porque no tienes otra opción qué estudiar: Postulaste y no ingresaste a la primera opción, así que tu segunda opción, si aquella que marcaste con desidia, resultó darte el ingreso a la universidad, al inicio no te agrada la idea, pero como muchos en tu promoción ya ingresaron, y no deseas “quedarte” o peor aún perderte la fiesta de cachimbos, entonces accedes a seguir dicha carrera, así esta no sea de tu agrado. Otra situación la viven muchos jóvenes que no pueden costearse sus estudios y algún familiar les dice que le ayudarán siempre y cuando estudien cierta carrera. ¿Difícil no?, pero como hemos dicho, lo importante está en conocer la vocación y compartir ello con la familia o los tíos que desean ayudarnos costeando los estudios.
Creer que estudiar computación (nivel usuario) o ingles es una carrera: Pareciera que todos saben de esto, pero no es así, todavía existe gente que piensa que estudiando computación a nivel usuario e ingles, tienen la vida asegurada. Estos conocimientos, obviamente son importantes, pero son solo herramientas para complementarlas con una carrera profesional. Ahí recién serán aprovechados en su máxima dimensión. Claro siempre y cuando tengas una mentalidad mucho más grande para la vida.
Como ves, quizá hayas notado que algunos de los errores, aquí presentados, los viviste en carne propia o por medio de alguna amistad. La solución para no caer en estos problemas o dejarse llevar por la familia, amigos, etc. es simplemente teniendo las cosas claras en cuanto a vocación. Una cosa es decir: no me gusta esa carrera, por eso no la estudiaré… a decir: Aquí tengo los resultados de mi test de orientación vocacional, el cual está corroborado por la información que conseguí en la charla vocacional y me indica que yo podría desempeñarme bien en esta carrera… ¡Si que se nota la diferencia!, ¿no?