Queridos amigos:
Mi vida ha cambiado mucho en los últimos meses, y por eso he demorado en responder sus correos. Pero igual los tengo presentes siempre, porque las 51 charlas que di en el 2006 y las 10 mil miradas de buscadores que encontré en todos esos colegios me conmovieron en lo más profundo de mi ser.
Ahora estoy en una búsqueda nueva. Vivo en Colombia haciendo una telenovela y quiero compartir con ustedes las razones de mi decisión. En primer lugar, quería retomar mi carrera de actor, que en los últimos tiempos había dejado pendiente, y, como saben, en nuestro Perú, por el momento, hay poco trabajo en la actuación.
En segundo lugar, quería decidir qué hacer con las telenovelas en mi vida. En el pasado me abrieron muchas puertas. Quizá no hubiera sido contratado en 3G o para el programa de radio, ni para las charlas que realicé por encargo de Logros La Guía del Postulante, si no hubiese sido un actor conocido.
Ustedes saben que en el camino de búsqueda vocacional no todo está dicho, y una de las bifurcaciones de mi sendero es que a través de las novelas encontré una llave para entrar a lugares muy ricos en experiencia. Ahora quiero ver qué puertas me permitirá abrir el actuar en otro país. Tengo claro que las novelas no son un fin para mí, porque me interesa mucho el servicio, y no siempre encuentro esto en ellas, aunque podría hallarlo. Para mí son solo un medio, una llave para ser usada de manera inteligente.
Muchos de ustedes saben que aparte de ser actor soy psicólogo, y estoy siguiendo una maestría en terapias por medio del arte, en la que puedo combinar mis dos pasiones. Desde que terminé la carrera, hace quince años, quise dedicarme a la investigación y aplicación de la orientación vocacional. Cuando inicié mis estudios mi mayor dedicación estaba en el arte y la menor en la psicología. En los últimos dos años esta tendencia cambió, y así me dediqué más a la psicología. Al tomar la decisión de volver a las telenovelas no significa que me aleje de la psicología ni mucho menos.
Por ello la tercera razón, y quizá la razón más importante, es que este año va a ser fundamental en mi vida. Voy a escribir un libro para la Editorial Planeta sobre orientación vocacional a partir de lo tratado en las charlas. Quiero seguir profundizando en el tema y poder servir de alguna manera a todo joven que quiere buscar su verdad. En nuestro Perú me hubiera sido muy difícil escribir, porque son demasiadas las actividades que surgen. Lejos, en cambio, puedo buscar, profundizar y reflexionar.
Quiero pedirles sus sugerencias sobre el libro: ¿qué esperan?, ¿qué quieren?, ¿qué necesitan?, ¿qué les gustó de las charlas?, ¿qué no les gustó? En el camino del aprendizaje hay que tener orejas grandes para escuchar todo, y yo las tengo, o las quiero tener; por tanto, no se limiten en sus sugerencias o críticas: yo sabré recibirlas. Escríbanme al foro, como de costumbre, a www.logros.edu.pe.
Luego de este proceso podré retomar el contacto con ustedes de una manera diferente. Las charlas continuarán, pero con una mejor presentación, con más alcances y más a la medida de sus preguntas; se mantendrán sin embargo los cuentos populares, que son los que contienen toda la sabiduría de antes, de ahora y de siempre. También podremos llegar a más lugares del Perú, donde los obstáculos externos son diferentes, donde hay menos recursos pero no menos ganas de crecer y conocerse.
Como toda decisión lleva consigo una renuncia, les cuento que esta vez tuve que renunciar a 3G. No saben el dolor que me causa. Traté por todos los medios de evitarlo, y venir al Perú a grabar los programas, pero fue imposible.
Quiero despedirme dándoles un abrazo tan grande como mi agradecimiento. Sus miradas y preguntas me cambiaron para siempre, y nos encontraremos en el camino, espero que con el brillo en los ojos del que sigue buscando y no se resigna a no ser feliz con lo que hace.
Javier Echevarría
Nota: Logros La Guía del Postulante, a través de su Director, agradece a Javier la dedicación puesta en cada una de las 51 charlas realizadas entre abril y noviembre del 2006. Agradece su gran capacidad de adaptarse a los cambios que este esfuerzo requirió para llegar a más de 10 mil jóvenes, cuatrocientos profesores y en no menos de ochenta colegios, universidades y municipalidades.
Te deseamos muchos éxitos, con la seguridad de que cada uno de los proyectos que emprendes los realizas con el esfuerzo, profesionalismo, caballerosidad y simpatía que te caracterizan.