Contabilidad: Una carrera de ayer, hoy y siempre

El estudio de la contabilidad proviene de tiempos ancestrales, desde que se empezó a desarrollar el comercio, la agricultura y la industria. Por ello ha estado vigente en la historia desde la Edad Antigua hasta la presente Edad Contemporánea. Pero eso no es todo, la importancia de llevar un registro contable en las actividades económicas es tal, que se presume que ésta carrera tenga una gran perspectiva a futuro, en donde podrían variar los mecanismos y procedimientos, pero nunca la necesidad de sus funciones.

• En la Edad Antigua: El hombre, gracias a su ingenio, proporcionó al principio soluciones a través de métodos primitivos de registración; un ejemplo es la tablilla de barro. Desde entonces, el sistema contable no ha dejado de evolucionar.


• En la Edad Media: Aquí se empiezan a producir las primeras monedas de oro. En el viejo continente se empieza a emitir y admitir este instrumento como uno de los principales medios en las transacciones internacionales.


• En la Edad Moderna: Se empieza a referir al sistema contable bajo el concepto de la partida doble (deudor/acreedor). Asimismo, se ponen en práctica las actividades comerciales concernientes a sociedades, ventas, intereses, letras de cambio, etc. Los inventarios también hacen su ingreso en este período, como una lista de activos y pasivos de una empresa antes que comience a operar.


• En la Edad Contemporánea: Se da lugar a la creación de Escuelas como instituciones de formación contable. Aparecen conceptos relacionados a las depreciaciones, amortizaciones, reservas, fondos, etc.


• Perspectiva a futuro: La contabilidad es una carrera con mucho futuro porque se van a necesitar contadores no sólo para llevar las cuentas o manejar los libros contables, sino también para realizar estrategias y dar más valor a las empresas del futuro, las cuales, desde ahora, ya se encuentran en un entorno competitivo.